1.- El que más te guste/atraiga
Todo el mundo que empieza con el tema de la música tiene un instrumento preferido. Aquel que vio algún día y se empeña en querer aprender a tocarlo. Este punto es sin duda el más importante de todos, ya que solo tú sabes el instrumento que más te gusta en este preciso instante. Mi instrumento preferido cuando empecé en el conservatorio era el clarinete, y quería tocar el clarinete. Pero acabé aprendiendo a tocar el piano, y ahora es sin duda mi instrumento preferido. Sin embargo, ¿por qué no empezar con el instrumento que más quería? Para eso, pasamos al siguiente punto a tener en cuenta.
2.- Disponibilidad en el lugar donde vives
Como ya recomendé en bastantes ocasiones, una forma genial de aprender música es la de estudiar en un Conservatorio o en una Escuela de música, porque te aseguras de tener profesores que te irán enseñando progresivamente, y de compañeros que te harán querer ir todas las semanas a seguir aprendiendo. En mi caso, quería tocar el clarinete, pero no había plazas disponibles para ese instrumento. ¿Cómo puede ser eso? Muy fácil. En un conservatorio hay un número determinado de profesores, y cada uno se encarga de determinados instrumentos (clarinete, trompeta, piano, guitarra...). Tanto el piano como a veces la guitarra son instrumentos bastante solicitados, por lo que cuentan normalmente con un número mayor de profesores, así como otros instrumentos no lo son tanto, y solo tienen un profesor para enseñarlo. Por lo tanto, mientras para clarinete solo había un profesor y a lo mejor cada año se ofertaban 2 plazas, para piano había un total de tres profesores, con más del doble de plazas por año. Fue por esta razón por la que me recomendaron empezar con el piano, básicamente.
¿Significa esto que, si me gusta un instrumento y quiero estudiar de forma oficial, pero no hay plazas suficientes... tengo que escoger otro instrumento? No necesariamente, pero siempre es un factor importante a tener en cuenta.
3.- Dinero
Desgraciadamente y como no podía faltar, también entra el juego el factor económico. Y es que hay instrumentos que cuestan más que otros. No puedo dar una lista detallada, pero os puedo dar algún que otro ejemplo.
Cuando empiezas con algún instrumento como la Guitarra o el Violonchelo, tampoco es que suponga mucho dinero hacerse con uno (casi seguro que el violonchelo te saldrá más caro, pero para empezar no te hará falta un instrumento buenísimo, y siempre está la perfecta opción de instrumentos de segunda mano). Lo que pasa con instrumentos así es lo mismo que te pasa con la ropa cuando eres pequeño: te va quedando pequeña a medida que creces. A un niño/a de 8 años no le puedes dar una Guitarra de tamaño "estándar", porque le quedará enorme y le será imposible. Tienes que escoger una Guitarra de un tamaño inferior, y en uno o dos años tendrás que escoger otra guitarra de un tamaño acorde a su edad, y puede que en otros dos años tengas que volver a comprar de nuevo otra guitarra, etc. ¿Es esto un problema? No realmente. Simplemente el tener en cuenta esto. Mi hermano está aprendiendo a tocar la guitarra, y llevará en su vida 3 guitarras o 4. Un amigo mío estaba aprendiendo a tocar el violonchelo y lo mismo. Sin embargo, yo solo tuve (y tengo) un piano, desde mi primer año. Instrumentos como el piano no necesitan adaptarse para la edad, como mucho tendremos que subir o bajar la banqueta donde nos sentamos y poco más. Puede que sea una inversión importante justo el primer año, pero nada del otro mundo. De hecho, mi piano no es de los caros y está en perfectas condiciones después de 10 años de uso. Obvio que si después ya sabes lo suficiente y quieres gastarte más dinero en un instrumento mejor es genial, pero para aprender tampoco necesitas lo mejor de lo mejor.
4.- ¿Te dejan tus padres?
Esta es una pregunta dirigida a gente menor o adolescente que vive con sus padres, pero puede dirigirse perfectamente a los padres y madres para que piensen también en ello. Puede que a ti te guste la batería o la trompeta, pero a lo mejor no puedes tocar esos instrumentos en tu casa. A lo mejor no hay el espacio suficiente para poner una batería en ninguna de las habitaciones, o puede que vivas en un lugar en el cual no puedes hacer tanto ruido, y el insonorizar una de las habitaciones no es un plan a corto plazo. Siempre puedes buscar alternativas, sitios fuera de tu casa como salas especializadas donde poder tocar sin problema estos instrumentos, o en vez de pensar en una batería "normal", pensar en una batería electrónica a la que poder enchufarle unos cascos. Este es también un punto esencial, así que si vives con tus padres, habla con ellos. Si tu hijo/hija quiere tocar algún instrumento así, plantearos el si de verdad puede o no.
Espero que estos puntos os ayuden a la hora de escoger un instrumento, y nos vemos en otra entrada del Blog! :)